Chocolate, Piura y los premios a una Mujer.

-         - Un jovencito vino y me compró un chocolate, con la envoltura que yo hago para cada uno de las barras que fabrico.  Se tomó una foto con la envoltura, sonriendo… ¿A quién se la enviaría el bandido?

Lo que me está diciendo Camucha es que, las relaciones de intimidad, forman parte de la actividad económica de un pueblo y de un país.  Compra algo para mantener o iniciar una relación.  Algo parecido al juego muy común del “amigo secreto”.   Relación de amistad, enamoramiento o de pareja.  Indistintamente.  Si hablamos con sinceridad todos los seres humanos mezclamos intimidad y actividad económica, tenemos que reconocer que estas dos actividades están comprometidas en la creación y negociación de “vidas conectadas” (ZELIZER, 2009, pág. 45).  Los abogados conocen mejor cuáles son los costos de este tipo de negociaciones, cuando dos amigos socios de un negocio, rompen repentinamente.  Cuando un negocio familiar tiene que desvincular a los miembros de la propia familia, por desconfianza recíproca.  O cuando tienen que litigar los procesos de separación o divorcio.  En esos litigios se acuerdan hasta del primer regalo que se hicieron, como aquel jovencito que le compró el estuche de chocolate a Camucha.

¡Cuánto te quiero y admiro Camucha!  Cuando veo tus ojos, mientras nos narras tus experiencias por el mundo empresarial del proceso de Cacao piurano que has decidido procesar, para llevarlo al mundo.  Hay pasión en lo que dices con un conocimiento impresionante.  Se percibe gozo.  Se percibe olor a mujer, descaradamente emocional.  Eso que a nosotros los varones, nos avergüenza tontamente.   Y es que, para hacer empresa, no hay peor enemigo que la razón pura, bajo sistemas de visiones tubulares de programaciones y proyecciones.  Costo-beneficio, sin más.  He ahí el fracaso de toda economía.  Digan lo que digan, Camucha, nadie puede negar que los únicos sobrevivientes a la crisis económica mundial, fue un fondo de inversión privada llamado Audur Capital.  Lo que tiene de peculiar este sistema de inversión económica, irlandés, es que está gestionado únicamente por mujeres, como tú.  No sufrió ni el más mínimo rasguño, según Largarde (MARÇAL, 2016, pág. 15).  Po eso, sonríes cuando me cuentas la anécdota de aquella compra de la envoltura bella, de aquello que fabricas con tus manos, con una ilusión y pasión increíbles.   ¿Qué más me enseñas con tu pasión por la comercialización del Chocolate?

Es dulce.  Lo tienes en barra y exquisitas tortas.  Te vuelve más activo en la función cerebral.  Acelera tus emociones.  Por eso se asocia siempre al amor.  Aunque esto último, es una fragilidad racional.  A mí, me hizo salir sangre por la nariz cuando comí el chocolate puro (al 100%), con una desesperación infantil, por comerlo ya.  Pero eso, No me quita las ganas de seguir saboreando el chocolate con menos porcentaje de Cacao.  Porque, a decir verdad Camucha, nada puede reemplazar en una relación afectiva, un buen chocolate para empezar la fiesta.  Al estilo del IV Festival de Chocofest, celebrado en Piura, nuestra tierra (ZAPATA, 2017). Aquí no solo has ganado un primer lugar.  Has reivindicado a tu pueblo.  A tu tierra.  Como lo has hecho con los hijos que tienes.  Porque nadie, como tú, sabes lo qué es dar vida desde un útero.  Eso mismo estás haciendo con este gesto y por eso, se te da el premio mayor: La mejor elaboración del Chocolate piurano este año.  Ya habías ganado otro mayor: el International Chocolate Awards, 2017.  Has dado a luz dos mellizos, en estos premios.  Porque tú si sabes cómo parir.  Eres, antes que nada, mujer.  Quiero aplaudir a la Universidad donde iniciaste en tus pasos para la economía (griego “oikos”= casa).  Para los intelectuales de le economía, desde Adan Smith hasta hoy, ignoraron este detalle etimológico.  Tú no lo has pasado por alto.  Has bebido ardientemente cada uno de los libros que te enseño esta universidad: Parir niños, criarlos, cultivar el huerto, hacerles la comida a los hermanos, ordeñar la vaca de la familia, coserles la ropa o cuidar al marido es “trabajo productivo” (MARÇAL, 2016, pág. 28), aunque la economía estándar no quiera considerarlos.  Por ello, la crisis en la que nos han metido, y que tú intentas rescatar contra viento y marea.  En nombre de las mujeres como tú, celebro tu solidaridad, tu garra, tus emociones, como ingredientes de una economía que puede ser tan dulce, frágil, firme y exquisita como el chocolate.  Nada se puede comparar con lo que te espera por delante, porque la empresa no está fuera de ti, está dentro, muy dentro.  Un abrazo, en nombre de Franklin, quien te lo profetizó y de lo mucho que tenemos que aprender los varones en la economía.  Besos, mientras tomo la fotografía al cliente que te compró la cajita hecha con tus propias manos.


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MARÇAL, K. (2016). ¿Quién le hacía la cena a Adam Smith? Barcelona: DEBATE.

ZAPATA, R. (02 de Diciembre de 2017). elcomercio.pe. Obtenido de elcomercio.pe: https://elcomercio.pe/peru/piura/chocofest-piura-mejor-cacao-piurano-reunido-lugar-noticia-478472?foto=2


ZELIZER, V. A. (2009). La negociación de la intimidad. México D.F.: Fondo de cultura económica.

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